Aceptación o rechazo de la herencia
¿Qué pasa si un heredero renuncia a la herencia?
Reparto de la herencia: ¿Cómo se lleva a cabo?
¿Qué sucede si no se hace testamento?
¿Cuál es el plazo para realizar la Declaración de Herederos?
¿Es necesario recurrir a un notario?
Abogado especializado en herencias
Conclusiones
La aceptación o rechazo de una herencia ha experimentado cambios significativos durante la crisis económica en España. Anteriormente, heredar solía ser una fuente importante de ingresos, tanto en términos económicos como inmobiliarios.
Sin embargo, hoy en día, se ha convertido en un dilema complicado. En este artículo, analizaremos las implicaciones de aceptar o rechazar una herencia, quiénes son considerados herederos forzosos, trámites que hay que realizar y la posibilidad de renunciar a una herencia.
Aceptación o rechazo de la herencia
Lo primero que explicamos es que en España, al aceptar una herencia, se acepta tanto el activo (bienes) como el pasivo (deudas).Esto significa que si las deudas superan el valor de los bienes heredados, puede ser conveniente renunciar a la herencia, aunque esta decisión es completamente personal.
Si las deudas superan los activos, el heredero debe utilizar su propio patrimonio para pagarlas. A menos que se acepte la herencia «a beneficio de inventario», como se explicará más adelante, en cuyo caso el heredero solo es responsable de las deudas con los activos heredados.
Para renunciar a una herencia de manera efectiva, es necesario acudir a un notario y presentar una renuncia formal.
¿Qué pasa si un heredero renuncia a la herencia?
Una pregunta frecuente es qué sucede con la parte de la herencia si se renuncia a ella. En este caso, depende de lo que esté estipulado en el testamento.
Si el testamento indica que los derechos sucesorios deben pasar a otro miembro de la familia en caso de renuncia, los descendientes de los herederos pueden heredar y decidir si aceptar o rechazar la herencia.
Si no hay instrucciones específicas en el testamento, la renuncia simple resultará en que la parte renunciada se distribuirá entre los demás coherederos.
En el caso de una sucesión intestada (sin testamento), si el pariente más cercano rechaza la herencia, los parientes del siguiente grado son los que heredan. Por lo tanto, si un abuelo fallece y su único interés es que las deudas no afecten a sus descendientes, tanto los hijos como los nietos deben renunciar a la herencia. Si los nietos son menores de edad, sus padres necesitarán autorización judicial para renunciar en su nombre.
En lugar de renunciar a una herencia, también existe la opción de aceptarla «a beneficio de inventario». Esto significa que solo se pagarán las deudas hasta el valor de los activos heredados, evitando que los acreedores embarguen los bienes personales del heredero si las deudas superan el valor de la herencia. La aceptación «a beneficio de inventario» debe hacerse ante notario.
Reparto de la herencia: ¿Cómo se lleva a cabo?
Cuando una persona fallece, se inicia un proceso burocrático para gestionar la herencia. Es importante tener en cuenta varios pasos:
- Obtener el Certificado Literal de Defunción del Registro Civil.
- Con el Certificado Literal de Defunción en mano, solicitar el Certificado de Últimas Voluntades en el Ministerio de Justicia (formulario 790).
- Si hay testamento, obtener una copia del mismo del notario que lo haya otorgado, cuyo nombre figura en el Certificado de Últimas Voluntades.
- Si no hay testamento, se debe realizar la Declaración de Herederos abintestato ante un notario competente, que puede ser el último domicilio del fallecido, el lugar donde se encuentran la mayoría de los bienes o el lugar del fallecimiento, según elección del solicitante.
- Pagar los impuestos de sucesiones, que dependen de la comunidad autónoma y generalmente deben liquidarse en un plazo de 6 meses a partir del fallecimiento
- Liquidar las plusvalías municipales de los bienes inmuebles, normalmente también dentro de los 6 meses.
- Realizar el reparto de los bienes entre los herederos. Si hay acuerdo entre ellos, esto se hace en el notario mediante una escritura pública de división y adjudicación. En caso de desacuerdo, se puede recurrir al juzgado, a menos que se cumplan ciertos requisitos para la partición ante notario según la Ley de Jurisdicción Voluntaria de 2015.
¿Qué sucede si no se hace testamento?
Hacer un testamento es un proceso relativamente sencillo y es la mejor manera de asegurar que tus deseos se cumplan después de tu fallecimiento. Cuando alguien fallece sin haber hecho un testamento, sus herederos serán los familiares que establece la ley. Por ejemplo, si la persona tiene hijos, ellos serán los herederos.
Para dejar constancia de quiénes son los herederos legales, se debe llevar a cabo un procedimiento conocido como «Declaración de Herederos», que debe realizarse ante un notario competente. En este procedimiento, se determina quiénes son los herederos legales según la ley.
¿Cuál es el plazo para realizar la Declaración de Herederos?
En principio, no hay un plazo específico para realizar la Declaración de Herederos. Sin embargo, hay un plazo de 6 meses a partir del fallecimiento para liquidar el Impuesto de Sucesiones, que es un paso necesario en el proceso de herencia. Por lo tanto, la Declaración de Herederos debe realizarse antes de liquidar el impuesto.
Hemos de tener en cuenta que hay que esperar 20 días desde la firma del acta de la Declaración de Herederos por si pudiese darse el caso en el que pudieran presentarse, a modo de plazo prudencial.
En la Declaración de Herederos será necesario contar con dos testigos, deberán testificar el parentesco entre el fallecido y el heredero.
Legítima y herederos forzosos
La legítima en una herencia, como establece el Código Civil, es la porción de bienes que el testador no puede disponer libremente, ya que está reservada por la ley para ciertos herederos llamados «herederos forzosos». La legítima es intocable, lo que significa que el testador no puede imponer condiciones ni limitaciones sobre ella.
La única forma de privar a un heredero forzoso de su legítima es mediante una desheredación judicial, que requiere una causa justa y una decisión del tribunal. Los herederos forzosos son:
- Descendientes (hijos y nietos).
- Ascendientes (padres y abuelos).
- Cónyuge viudo.
Si un testamento va en contra de la legítima de un heredero forzoso sin justa causa, es impugnable y puede dar lugar a una acción legal para reclamar la legítima.
¿Es necesario recurrir a un notario?
No es necesario recurrir a la notaría y, por lo tanto, se pueden evitar los costos asociados a ella en las siguientes circunstancias:
- Cuando no hay inmuebles en la herencia: En situaciones en las que el fallecido no dejó propiedades inmobiliarias, como viviendas o terrenos, y en su lugar herederos reciben dinero en efectivo, acciones, productos financieros, o bienes muebles como joyas u obras de arte, no es obligatorio realizar trámites notariales. La aceptación y distribución de la herencia se pueden llevar a cabo mediante un acuerdo privado, conocido como cuaderno particional, que detalla los activos, pasivos, y las asignaciones específicas a cada heredero. En este caso, los herederos no incurrirán en gastos notariales, pero aún deberán pagar el Impuesto de Sucesiones dentro del plazo establecido.
- Cuando solo existe un heredero: Si solo hay un heredero que adquiere propiedades inmobiliarias y no hay otros beneficiarios con derechos legítimos, no es necesario visitar a un notario. El heredero puede presentar una solicitud con los documentos relevantes, siempre que su firma esté notarialmente legitimada, para inscribir los activos heredados en su nombre en el Registro de la Propiedad. Sin embargo, es esencial que el Impuesto de Sucesiones haya sido pagado con anterioridad.
- Cuando el cónyuge continúa disfrutando de los bienes heredados como usufructuario: En muchas ocasiones, después del fallecimiento de uno de los cónyuges, el otro sigue utilizando los bienes heredados mientras esté vivo. Esto se aplica cuando el testamento otorga al cónyuge sobreviviente el usufructo universal y vitalicio de los activos heredados. El viudo o viuda puede mantener su situación financiera similar a la que tenía antes del fallecimiento de su pareja. En este escenario, no es necesario realizar trámites notariales.
En casos como estos, si los herederos no tienen la intención de vender o dividir los bienes, la herencia puede permanecer indivisa hasta que el cónyuge sobreviviente fallezca, resolviendo el pago de los impuestos con una instancia en documento privado. A dicha instancia, no obstante, habrá que acompañar la documentación justificativa del óbito, los bienes de la herencia, y acreditar quienes son los herederos.
Abogado especializado en herencias
Un abogado especializado en herencias ofrece una variedad de servicios relacionados con la planificación, gestión y resolución de asuntos legales relacionados con las herencias. Estos son algunos de los servicios que un abogado de herencias en Asesoría Sotos puede ofrecer:
- Asesoramiento Legal: El abogado te asesora sobre tus derechos y responsabilidades en relación con la herencia. Te explica las implicaciones legales y fiscales de aceptar o renunciar a una herencia, así como las opciones disponibles.
- Planificación Sucesoria: Ayuda a planificar cómo se transferirán los activos y propiedades a tus herederos cuando fallezcas, lo que puede incluir la redacción de un testamento, la creación de un testamento vital o poder notarial, y la planificación para minimizar los impuestos de sucesiones.
- Redacción de Testamentos: Prepara testamentos y otros documentos legales que detallan tus deseos sobre cómo deben distribuirse tus bienes y propiedades después de tu fallecimiento.
- Liquidación de Impuestos de Sucesiones: Ayuda a calcular y liquidar los impuestos de sucesiones y donaciones que deben pagarse a las autoridades fiscales como resultado de una herencia.
- Aceptación o Renuncia de Herencias: Asesora sobre si debes aceptar o renunciar a una herencia y te guía a través del proceso legal correspondiente en función de tu elección.
- Reclamación de Herencias: Si crees que tienes derecho a una parte de una herencia pero no estás recibiendo lo que te corresponde, el abogado puede ayudarte a reclamar tu parte legítima.
- División de Bienes: Si una herencia implica la división de activos entre varios herederos, el abogado puede ayudar a negociar acuerdos y redactar escrituras de partición.
- Desheredación y Conflictos Familiares: Si se plantean problemas de desheredación o conflictos familiares en relación con la herencia, el abogado puede asesorar sobre las opciones disponibles y representarte en disputas legales si es necesario.
- Inscripción en el Registro de la Propiedad: Ayuda con la inscripción de bienes inmuebles heredados en el Registro de la Propiedad, lo que es necesario para transferir legalmente la propiedad.
- Representación Legal: En caso de litigios relacionados con la herencia, el abogado puede representarte en juicios y defender tus derechos ante los tribunales.
- Asistencia Notarial: Trabaja en estrecha colaboración con notarios para asegurarse de que los documentos relacionados con la herencia se redacten y ejecuten correctamente.
- Asesoramiento Patrimonial: Brinda orientación sobre cómo proteger y gestionar tu patrimonio, así como sobre la planificación de sucesiones para futuras generaciones.
Cada situación de herencia es única, y los servicios de un abogado de herencias pueden adaptarse a las necesidades específicas de cada caso. Contáctanos si necesitas consultar con un abogado especializado en herencias para recibir orientación legal y asegurarse de que se aborden todos los aspectos legales de manera adecuada.
Conclusiones
La aceptación o renuncia de una herencia en España durante la crisis económica puede ser una decisión compleja y depende de varios factores, incluido el valor de los activos y deudas heredadas, las circunstancias personales y familiares, y las implicaciones fiscales. Es importante buscar asesoramiento legal de un abogado especializado en herencias para tomar la decisión más informada y adecuada en cada caso. También es fundamental conocer la legislación vigente en la comunidad autónoma correspondiente, ya que las normativas fiscales pueden variar según la región.
